Muchos profesionales con talento evitan mostrar su valor en LinkedIn por miedo a parecer egocéntricos. Mientras tanto, otros con poco fondo pero mucha forma dominan la atención. El resultado: personas brillantes invisibilizadas.
¿Por qué ocurre esto?
La clave para posicionarte correctamente en LinkedIn está en comunicar con estrategia, pero sin perder autenticidad.
Antes de publicar, necesitas claridad interna.
Tu mensaje en LinkedIn debe unir tu experiencia, tus valores y tu visión para generar confianza.
Tu perfil de LinkedIn es tu carta de presentación. Asegúrate de que:
Tip: Es mejor parecer “realmente bueno en algo específico” que “experto en todo”.
Lo que publicas en LinkedIn, al igual que en otras redes sociales, habla por ti. El error común es caer en frases motivacionales sin sustancia o autopromoción constante.
¿Qué tipo de contenido aporta sin vender humo?
Sé generoso con tu conocimiento, pero no invasivo con tus servicios.
La conexión auténtica no viene de parecer perfecto, sino de mostrarte humano. Habla en LinkedIn de tus errores, tus aprendizajes y cómo evolucionaste. Eso genera empatía y confianza.
Importante: La vulnerabilidad no es sobreexposición emocional. Es compartir lo justo para inspirar o enseñar.
No publiques en LinkedIn solo por “estar activo”. Para posicionarte de forma sana, comenta, comparte y reacciona con intención. Un buen comentario en el post de otro puede tener tanto impacto como una publicación propia.
Evita los clichés (“gran aporte”, “excelente reflexión”).
Aporta perspectiva, pregunta o comparte experiencia.
Esto te posicionará en LinkedIn como alguien que piensa, no que solo repite.
El número de impactos en LinkedIn importa, pero no necesitas publicar todos los días si no vas a ser coherente con lo que dices, haces y proyectas. Una presencia bien pensada y coherente genera autoridad sin necesidad de gritar.
Posicionarte en LinkedIn sin parecer un vendehúmos no solo es posible, es necesario.
La red necesita más profesionales reales, con historias verdaderas y propuestas con impacto.
Si comunicas con intención, aportas valor y cuidas tu forma tanto como tu fondo, destacarás sin necesidad de inflar tu imagen.
Suscríbete y empieza a transformar tus creencias en acciones que marquen la diferencia.
Únete a la comunidad y empieza a escribir tu propia historia.